Empezamos este bloque definiendo que era la literatura
infantil de autor, que son tres términos con significados diferentes:
- Literatura es el arte que se crea con las palabras. Para que un texto sea literario tiene que pertenecer a la prosa, al verso o al drama. Tiene que tener una intencionalidad artística con función estética o poética y que no sea real, es decir, que sea de ficción. Aristóteles, separó los textos literarios en tres géneros: narrativo (actualmente se conoce como la prosa), poesía (verso) y teatro (drama).
- Infantil son las edades comprendidas de cero a doce años. De 0 a 2, son libros de imágenes, pero no se consideran literatura. La literatura infantil comienza desde los 2 años hasta los doce.
- De autor: son de alguien ya sea conocido o no.
Posteriormente describimos tres palabras fundamentales para
esta asignatura, que nos sirven para saber que es un libro, un texto y que es
la literatura.
El libro, es el formato; el texto es lo que se encuentra
dentro del libro aunque puede ser un texto oral y por último la literatura son las
características que tiene el texto en el libro.
En literatura infantil, solo existen tres posibilidades de
textos:
- Texto literario: deben pertenecer a un género literario nombrado anteriormente, es decir narrativo, poesía o teatro.
- Texto moralizante: al final del texto tiene una moraleja, propio de las fábulas o valores.
- Texto didáctico: aprendes cosas del entorno que te rodea, así como puede ser “Teo en el zoo.”
Anteriormente, he nombrado las características de los textos
literarios, dichas características, nos
permiten diferenciar si un texto es literario o paraliterario. Un texto
literario, su intención es artística, mientras que un texto paraliterario,
tiene como intención principal dar
informaciones, hacer pensar a los niños por ellos mismos, moralizar...
Antiguamente lo que antes se consideraba literatura infantil, hoy en día es paraliteratura
moralizante o didáctica.
La literatura infantil, lo que ahora es paraliteratura
moralizante o didáctica, comenzó en los años 80, con libros como: “Oliver
button”, cuentos para educar niños felices, o los cuentos de callejas, pero
realmente, la literatura infantil, como la conocemos hoy en día comienza hacia
los años 90, en esta literatura no sólo disfrutan los niños, sino también los
adultos. Por esta época comienzan los álbumes de imágenes.
Los álbumes de imágenes, están elaborados para que los niños
disfruten de la lectura y de los dibujos; con respecto a su aspecto, tienen una
portada dura y unos dibujos llamativos debido a sus colores, las hojas son no
cortantes y su letra es reconocible con un tamaño que ronda los 14 y 16 puntos.
Respecto a mis prácticas, si puedo decir que a los niños se
le leyeran libros y tenían una biblioteca en el aula, por las mañanas, al
entrar cada niño cogía un libro y se iba a su sitio a verlo y a disfrutar con
él, posteriormente nos íbamos a la asamblea y la maestra o yo misma les leíamos
los libros que los niños traían de casa, la mayoría de las veces eran cuentos
paraliterarios.
Me acuerdo de un álbum de imagen que si que leyó la maestra: “Los
chivos chivones”, lo recuerdo porque me llamó mucho la atención en cómo lo contaba
la maestra y pude ver como los niños disfrutaban y se lo sabían de memoria. Un par
de días a la semana, se leía el cuento de “Suso”, este cuento se lo daba a los
niños el viernes y la profesora les decía que lo había traído Suso. También tengo
que decir que estaban haciendo un cuento viajero, porque cada fin de semana, un
niño se llevaba a Suso y perro y tenían que hacerse fotos con él y hacer una
historia sobre lo que habían hecho; esta historia se solía contar a los niños
en la asamblea del martes.
La profesora también les enseñaba poesías, cuando yo estuve
en el aula, la que les enseñó una de Gloria Fuertes, “La tortuga” que dice así:
Iba una
tortuga por la capital
Iba despistada, con
tanto autocar
Buscaba una tienda,
quería comprar
Un sombrero nuevo y
medias un par.
Se compró un sombrero,
con cintas de seda
Y tan elegante salió de
la tienda.
Pasó una tartana y tres
bicicletas
Y la tortuguita guardó
su cabeza.
Cuando de repente… su
cabeza asomó
Zass… pobre sombrerito
se lo atropelló
Una tartanita con un
percherón.
Y la tortuguita dijo:
¡¡ QUE FATALIDAD, YO ME
VOY AL CAMPO…
QUE ROLLO DE CIUDAD!!
Como había vocabulario que desconocían los niños, como
percherón o tartanita… la profesora les explicó lo que era y para que no se les
olvidara, cada vez que decián la poesía preguntaba que si se acordaban de lo
que era, para que ellos mismos lo dijeran.
Por último decir, que en la biblioteca de aula, cada niño
tenía su propio libro elaborado por ellos mismos con ayuda de las familias,
eran libros biográficos.
Mi recuerdo de la infancia con respecto a la literatura es escaso,
por eso he preguntando a mi madre me ha dicho que todos los días me leía un
cuento del que sí que me acuerdo que me gustaba mucho era el de Los tres
cerditos y Caperucita roja. Otro recuerdo
que tengo es de ir al teatro a ver los títeres de cachiporra, en el que todo el
mundo participaba, exactamente recuerdo la obra del traje nuevo del emperador.
En el colegio, cuando yo estaba en infantil, tampoco recuerdo mucho,
pero me acuerdo de una poesía Federico García Lorca “el lagarto está llorando”,
que nos enseño la profesora y yo me la aprendí de memoria, decía así:
El lagarto está
llorando.
La lagarta está
llorando.
El lagarto y la
lagarta
con
delantalitos blancos.
Han perdido sin
querer
su anillo de
desposados.
Ay, su anillito
de plomo.
Ay, su anillito
plomado.
Un cielo grande
y sin gente
monta en su
globo a los pájaros.
El sol, capitan
redondo,
lleva un
chaleco de raso.
¡Miradlos, qué
viejos son!
¡Qué viejos son
los lagartos!
¡Ay como lloran
y lloran!
¡Ay, ay como
están llorando!
Antes de empezar este bloque, pensaba que esta asignatura me
iba aburrir un poco, ya que a mí la literatura no me gustaba, pero poco a poco,
me he dado cuenta que todo lo que había estudiado anteriormente, es decir en la
ESO y Bachillerato, no tenía nada que ver con esto, que era totalmente
diferente y que aspectos tan importantes y básicos como saber elegir un buen
libro o cantar un cuento, nunca me los habían enseñado; con el paso de los días
me di cuenta de la importancia que tiene esta asignatura para una maestra de
Educación infantil que anteriormente no sabía que se podían transmitir y
enseñar tantas cosas con un libro, un cuento, un álbum de imagen o una poesía.
Anteriormente
a este bloque yo tenía todo mezclado y no sabía diferenciar entre un álbum de imágenes,
cuento, paraliteratura y literatura.
Como futura
maestra, tendré en cuenta que debo de tener una biblioteca en el aula
actualizada, ya que la literatura infantil está en continuo movimiento, para
ello debo saber seleccionar álbumes de imágenes. Para seleccionarlos hay que tener en cuenta el momento evolutivo en el que
se encuentran en su desarrollo cognitvo, emocional y lingüístico. También hacer un análisis previo de un libro
cuyo objetivo es saber si al niño le va a resultar atractivo e interesante. Lo primero
que tengo que tener en cuenta, a la hora de analizar un libro es la edad a la que va dirigida,
luego debo fijarme en su formato esto me indica si el libro es atractivo,
manejable, resistente (seguro); el tercer paso es fijarme en las ilustraciones
si son artísticas o estereotipadas y que concuerden con la historia; también
debo tener en cuenta que el tipo de letra sea estandarizado para que sea de
fácil reconocimiento para los niños, su tamaño y el interlineado. Con respecto
a los contenidos, el tema tiene que ser interesante, uno de los temas que más
les gusta a los más pequeños son los escatológicos; el tema debe ser
comprensible y adecuado a la vez que motivador. La estructura puede ser lineal,
es decir con un planteamiento, nudo y desenlace, como ocurre con el libro de Orejas de mariposa; o también puede ser
circular con un planteamiento, un nudo un desenlace y vuelta al planteamiento
como acurre en el caso de un bicho
extraño. También debo tener en cuenta que los roles sean cercanos y que los
niños puedan identificarse con los personajes, por lo tanto tienen que ser
reconocibles y héroes a imitar. El lenguaje debe ser adecuado y con vocabulario
sencillo. A la hora de analizarlo, no me puedo olvidar de los valores y
contravalores con los que nos podemos encontrar; y por último pensar en lo que
podemos hablar con los niños después de leerles el cuento, para saber los
aprendizajes que han obtenido con él.
Como conclusión
pienso que este bloque me ha sido muy útil para un futuro y ahora sé que no
sólo los niños disfrutan con la lectura de un buen cuento y que a todos nos
gusta que el cuento este bien contado, en clase cuando se lee algún cuento sigo
disfrutando como si fuera una niña pequeña.
Pienso que no sólo debo saber analizarlo, sino saber cómo contarlo y poder transmitírselo
a los niños, pero esto lo veremos en el bloque 3.
Bien.
ResponderEliminarLos textos para niños, con carácter didáctico o moralizante, datan de la Edad Media, no de los 80. En estos años se produjo el primer boom de la literatura infantil al incluirla en las actividades escolares aunque fue en los 90 cuando se redefinió el término y cuando aparecen los libros para niños prelectores.
No has hablado apenas de la evolución de la literatura y de cómo evoluciona su concepto ni de los tres géneros literarios en relación con la literatura infantil.